Tapp Water

"Hay que repensar el papel del plástico en nuestra vida diaria"

Rocío Alcocer

CEO de Tapp Water

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Tapp Water

Es indudable que existe, cada vez más, un interés por la salud y el impacto que el medioambiente tiene en nuestro día a día. Entrevistamos a Rocío Alcocer, CEO de Tapp Water, una empresa financiada por Enisa con 80.000 euros en 2018, que da pasos hacia adelante en la importancia de cuidarse de una manera responsable y económica y en la que el I+D+i juega un papel importante en el diseño y desarrollo de su producto: un filtro para poder beber agua del grifo de manera segura y sostenible.

18 de noviembre de 2019

Rocío, ¿cómo surge la idea?
Magnus y Alex, dos emprendedores de Alemania y Suecia, al venir a vivir a Barcelona observaron que el sabor del agua del grifo no era agradable y que mucha gente consumía agua embotellada. Comenzaron a investigar la calidad del agua comprando más de cincuenta filtros provenientes de todas las partes del mundo. Analizaron los pros y los contras, las soluciones y alternativas posibles al consumo de agua embotellada, descartando las soluciones económicamente poco ventajosas o difíciles de utilizar, aunque hasta 2016 no salió al mercado nuestro primer producto.

¿Cuál es el valor determinante a la hora de que un consumidor opte por vuestro producto o por otro?
La combinación de comodidad —usabilidad sencilla para el consumidor—; sostenibilidad —apuesta por la innovación en todas las fases del desarrollo del producto— y un precio asequible. Innovamos continuamente en nuestros materiales y procesos para que vayan en línea con nuestra misión: tener un impacto positivo.

¿Qué barreras os habéis encontrado al apostar por un negocio innovador frente al mercado tradicional del agua embotellada?
Apostar por la innovación en un producto físico ha sido nuestro principal reto, ya que requiere de tiempos más largos que el mundo digital. En nuestro caso, el equipo fundador no tenía experiencia en el desarrollo de productos físicos. Ha sido un aprendizaje continuo que ha pasado desde entender cómo funciona una cadena de producción, encontrar el proveedor adecuado, hacer los testeos de calidad, hasta encontrar inversores —en España más enfocados al mundo digital— que apuesten por un producto físico.

Estáis involucrados en campañas como “Gota a gota” o el “Reto de los 30 días”. ¿Cómo podemos contribuir a nivel individual a la mejora del medioambiente?
Estas campañas empezaron siendo internas y ahora se han expandido. “Gota a gota” empezó como un voluntariado en la que el equipo de Tapp Water, después de la jornada laboral, hacíamos recogida de residuos en la playa. No obstante, si bien lo más importante es actuar a nivel empresarial, previniendo el residuo, podemos marcarnos pequeños retos individuales.

¿Cómo es el equipo de Tapp Water? ¿Ayuda tener perfiles diferentes? ¿Qué implicación tiene en los objetivos de la empresa?
El equipo es muy diverso. Somos veintitrés personas de dieciséis nacionalidades diferentes y con perfiles muy dispares, lo que nos da una visión muy amplia. A nivel cultural los empleados de Tapp Water estamos muy alienados con la misión de la empresa, mostrando un interés especial en tener un impacto positivo.

¿Creéis que ha habido una evolución de las Administraciones en políticas de medioambiente? ¿Qué queda por hacer?
En general, me sorprende lo poco que se habla del medioambiente en las Administraciones y también en el ámbito privado. Debería estar más presente en el discurso político. Tengo la sensación de que lo vamos postergando, pero antes o después, tendremos que enfrentarnos a ello. En este momento el peso mayor está en los ciudadanos y así lo vemos en movimientos como Fridays for future. Es necesario trasladar a las empresas que es imprescindible afrontar los retos y la responsabilidad de su impacto medioambiental. No es equitativo que todo el peso recaiga sobre el consumidor, gravando los productos, por el mero hecho de que sean sostenibles. Afortunadamente, los Objetivos de Desarrollo Sostenible están más presentes en el día a día de las empresas, pero aún debemos hacernos más preguntas hacia la mejora continua.

¿Qué papel juega la comunicación en la concienciación de la sociedad? ¿De qué manera la enfocáis en vuestra empresa?
Desde Tapp Water buscamos poner nuestro conocimiento, apoyado en estudios de organismos internacionales independientes, y las herramientas que tenemos, a disposición del consumidor, comunicando que existe una alternativa real al consumo del agua embotellada. Se trata de proponer gestos fáciles que permitan facilitar el cambio hacia la reducción del consumo de plástico, explicando los aspectos negativos del plástico de un solo uso y los aspectos positivos de los nuevos materiales, para que el consumidor extraiga sus propias conclusiones y obre en consecuencia.

¿Tenemos en España una cultura empresarial sostenible?
Desde mi posición como CEO de Tapp Water creo que falta mucho por hacer. Cuando hablamos de productos físicos sostenibles, nos referimos a la vida útil del producto, pero poco a la vida anterior que ha tenido antes de llegar a nuestro hogar. En España, deberíamos analizar más la cadena de valor de nuestros productos. Preguntarnos de dónde vienen los materiales que utilizamos, cómo fabricamos, qué transporte es el más idóneo, el coste del producto…

El futuro del plástico es controvertido, ya que representa una amenaza para el medioambiente, ¿cómo podemos evitarlo?
La mala prensa ha conseguido que se demonice un producto, el plástico, que de por si no es malo, lo que no es correcto es el uso que le estamos dando. Hay que repensar el papel del plástico en nuestra vida diaria.

El packaging de vuestro producto es biodegradable. ¿Cómo invertís y elegís los materiales?
Pensar en el packaging nos llevó mucho tiempo, ya que tratamos de que en todas las fases de desarrollo del producto se lleven a cabo criterios de sostenibilidad. Utilizamos cartón reciclable, impreso con tinta de soja y sin ningún tipo de pegamento. El papel se dobla mecánicamente para que el producto esté protegido sin necesidad de papel adicional.

¿Cuál es el futuro de los embalajes? ¿Llegaremos a ser 100 % sostenibles?
Los embalajes son uno de los temas que aún falta por resolver. Se necesita mucha más innovación en materiales en un momento en que la venta online está tan en auge. Existen diferentes estudios que analizan el impacto que tiene el sector del e-commerce. Si vamos hacia un mundo más digital hay que encontrar una alternativa a los productos que sean de usar y tirar, invirtiendo en materiales perdurables en el tiempo y con poco impacto medioambiental. No sabría definir qué se entiende por sostenibilidad total. Hay pequeñas acciones que se pueden llevar a cabo, como por ejemplo, tener una huella de carbono neutral.

¿De qué manera contribuye a la sostenibilidad la app de Tapp Water?
La finalidad principal es saber el estado de los cartuchos, aunque también extraemos datos que nos ayudan a elaborar estadísticas sobre el consumo y el ahorro de agua y plásticos. No deja de ser una manera de reforzar cambios que tengan un impacto positivo.

¿Qué os ha aportado la financiación de Enisa?
Lo que valoramos más es su sello de calidad y el hecho de que la financiación de Enisa no requiera de ningún aval, algo importante para el emprendedor que pone mucho dinero en riesgo cuando invierte en su proyecto. En definitiva, Enisa nos impulsó a creer más en nuestro proyecto.

¿El carácter emprendedor de los españoles es una buena carta de presentación de cara a la exportación?
Hemos vendido más de cincuenta mil productos en sesenta y cinco países, si bien, actualmente nuestro mercado se centra básicamente en la ciudad de Barcelona. Buscamos tener una cara visible en Cataluña y, poco a poco, adaptar nuestro producto a las necesidades de otros puntos de España y a los mercados europeos similares al nuestro, como Italia.

¿Cómo imagináis el futuro?
Esperamos que en el mundo del futuro haya más transparencia y que los consumidores puedan decidir los productos que compran estando más informados.

"El medioambiente debería estar más presente en el discurso político de las Administraciones y en el ámbito privado".